Tu propósito en este mundo

Entré a un trabajo en una empresa multinacional, me creía la reina de Recursos Humanos. Figuraba en una oficina enorme y solo para mi con vista al San Cristóbal (un cerro muy conocido de Santiago de Chile), a mis 26 años y con un jefe que era una maravilla. ¡Nada podía ser mejor!

Él confiaba en mi trabajo y yo hacía lo que me parecía mejor, así que todo simplemente fluía.

Pero pasaron 6 meses y un día, llegó con la noticia de que lo trasladaban a Casa Matriz y que lo iban a reemplazar. "Uf, que triste, pero seguro que lo reemplazarán con alguien igual que él" pensé, inocentemente.

Más no.

Todo el año siguiente soporté una jefatura que sólo me hacía dudar de mi. Era como si cada vez yo fuera más pequeña e indefensa...como si tuviera menos fuerzas para enfrentarlo.

Todo lo que hacía estaba mal, cada día era un desastre o cada esfuerzo un error. Vivía frustrada, llorando e incluso con él ¡tenía mi autoconfianza laboral por los suelos! Me sentía completamente vulnerable.

Sin darme cuenta, estaba depositando todo mi valor como profesional en lo que él opinaba de mí.

Sin duda, siempre existirán personas que duden de ti y de mi, y te aseguro: serán muchas. Incluso personas que tengan una visión distinta a ti de lo que son virtudes o defectos, como siempre menciono: en un lugar equivocado, una virtud puede ser un defecto.

Ser amable y honesta puede ser algo mal visto.

Ser dura y castigadora con los demás, algo bueno.

Cada lugar tiene sus reglas, según los valores de las personas que construyen ese espacio.

Pero no podemos depender de lo que pase en nuestro entorno, en esperar que dejen de dudar de nosotras para así confiar en uno misma. Eso es darle total y absoluto poder a la otra persona, y negar la inmensa y gratificante responsabilidad que tenemos para cambiar nuestro camino.

Tienes un inmenso poder, y es tú responsabilidad comenzar a verlo y a ponerlo en acción.

Tienes el poder de trabajar en ti y empezar a poner el foco en lo interno (lo que piensas tú de ti) y restarle poder a lo externo (está claro que puede que no te dejé de importar, pero lo relevante es que no sea esa la guía de tus propias decisiones).

Tienes la oportunidad de retomar el poder y tomar las riendas de la situación que hoy te preocupa o te hace sentir indefensa e insegura.

Tienes el poder de salir del piloto automático y comenzar a reflexionar y buscar ¿cuál es mi propósito en este mundo? ¿a qué vine a la tierra?

Uno de los 5 elementos para ser feliz en la vida, es tener un propósito, algo más grande por lo que levantarnos todos los días. El mío por ejemplo es acompañar a las mujeres, de corazón, a recorrer este lindo y potente camino, para que así tomen decisiones poderosas que transformen su vida. Deseo para cada mujer un nuevo estilo de vida, en donde día a día experimenten plenitud y armonía desde su trabajo de autoestima, amor propio, autoconfianza, autoaceptación y autocuidado.

Tienes el poder de confiar en ti y en tus capacidades en tu trabajo, y atreverte a conectar con tu propósito para así mostrarlo y compartirlo con los demás.

Yo merezco conocer todo lo bueno que tienes que entregarme.

Tu hermana, familia y amigos también.

Esa persona al otro lado del mundo igual.

Tu propósito en este mundo es importante y tu tarea es descubrirlo, y si ya lo sabes, compartirlo.

Te dejo con esta pregunta ¿qué harás hoy para empezar a confiar en que tienes mucho para darnos? Eres esencial.

¡Nos vemos pronto en Autoestima 360°! Ya estoy deseando que aprendas todo lo nuevo que he preparado para ti con tanto amor. ¿Ya te agendaste los eventos en el calendario? En el correo de tú momento sagrado está el link ¡Yeiiii!

Cariños del alma,

Mipacareu.